Podría decir
que es completamente genial, pero la verdad es que en cierto modo me ha
decepcionado. Pensé que sería más parecido al primero. Creo que desde un buen
principio Day ha abusado de los problemas que pueden llegar a tener Gideon Cross y Eva Tramell, ya que durante
toda la historia podemos ver riñas de todo tipo, y por lo que parecen,
tonterías. También destacar que en este libro y el primero, Reflejada en ti y
No te escondo nada, Sylvia Day ha hecho un uso ‘’extremo’’ de vocabulario soez.
No es algo que pueda molestar mucho pero si que debía ser mencionado.
Algo que me
ha gustado mucho es la actitud que tiene Eva, al principio nos la mostraba como
a una mosquita muerta, aunque algo rebelde, y en esta la he visto más
independiente. También me ha parecido interesante el final ya que era
totalmente impensable, pero muy bueno, lo que hace que tenga muchas ganas de
continuar leyendo la saga.
La
estructura del libro es acertada porque ha contado lo que debía, no ha metido
mucha cosa para rellenar, aunque tal vez y como he dicho antes, demasiados
conflictos. Ni es corto ni largo. Realmente se me hizo muy fácil de leer.
Libro que recomiendo a todos aquellos que hayan leído Cincuenta sombras de Grey y Amos y Mazmorras, de Lena Valenti.
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